lunes, 30 de mayo de 2016

ARAUCANÍA; EL PENSAMIENTO DE LA CAM




ARAUCANÍA; EL PENSAMIENTO DE LA CAM

En la noche del domingo 29 de mayo, Televisión  Nacional proyectó un programa publicitario de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM)
En el año 2013, el dirigente de la CAM, Héctor Llaitul, publicó un extenso documento  en que define el pensamiento de este grupo sedicioso.
Publico párrafos seleccionados de este documento, no es corto, tampoco es de fácil lectura. A pesar de esto, pido que lean lo que publicó para distinguir lo que afirmaron los “guerrilleros” que TVN mostró en pantalla.
jba

DEL DOCUMENTO DE LA CAM:
<<Si bien la CAM, aún no ha elaborado una propuesta-documento sobre autonomía, en sus planteamientos ha dejado claro que ésta, se asumirá en los hechos, a través de una  praxis política que permita crear una nueva correlación de fuerzas a favor de un proyecto autonómico.  El  punto  de  partida,  es  la  reapropiación  del  concepto  de  autonomía,  en donde  su  uso  implique  independencia  del  movimiento  mapuche,  que  en  la  práctica significa  no  más  sometimiento  a  la  mediación  de  los  partidos  políticos  y  de  otras  instituciones  del  Estado  chileno.  Entonces  la  independencia  de  partidos  y  demás influencias  políticas  winka,  es  el  punto  de  partida,  es  la  condición  necesaria  para  la maduración de la lucha mapuche propiamente tal, como se la conoce hoy día. Es el primer paso en  la búsqueda de  la superación de  la condición de pueblo oprimido. Esta forma de entender  y  hacer  autonomía,  representaría  en  los  hechos,  una  de  las  características esenciales  en  la  nueva  forma  de  hacer  política  de  la  CAM.  La  autonomía  significa independencia  total  frente  al  Estado,  las ONG,  los partidos políticos, etc.  Independencia que se expresa en el ámbito del pensamiento y de la organización política.  En este contexto se cuestionaba la relación de dependencia de los grupos mapuche respecto de  los partidos políticos,  lo que  incluía  aquellas organizaciones que de manera formal  se  declaraban  “independientes  o  autónomas”,  pero  que mantenían  relaciones  y  posiciones ambiguas en cuanto a  los partidos políticos,  lo que a  la  larga,  los  llevó a tener un  perfil  negociador,  asumiendo  planteamientos  reivindicativos  contradictorios.  Es  por esto que para  la CAM es prioridad  la  independencia de  la organización mapuche frente a los  partidos  políticos  y  el  Estado,  como  a  su  vez  la  re-significación  de  las  formas  de organización  mapuche.  Por  tanto  la  autonomía  para  la  CAM  significa  la  negación  al sometimiento  político  y  organizativo winka,  para  pasar  a  ser  insubordinación,  rebeldía,  pero sobre todo, resistencia>>.
 <<Esto  es  parte  de  un  pensamiento  Anticolonial  en  donde  la relación de dominación es caracterizada como un régimen de ocupación territorial. Por lo cual  expresamos  en  su  momento;  “somos  un  pueblo  acosado,  invadido,  usurpado  de territorio y que lucharemos como Pueblo, cultura y Nación”>>.
<<Se  caracteriza  a  la  situación  como  Colonial,  razón  por  la  cual  se  cuestiona  la institucionalidad  de  un  sistema  de  dominación.  Este  desconocimiento  de  los  marcos institucionales conlleva una desobediencia hacia el Estado, el cual se considera  ilegitimo, opresor, ajeno e  impuesto en un  territorio y espacio ancestral. Hemos dicho como CAM que  es  necesario,  por  tanto,  establecer  una  estrategia  para  “sobrepasar  las  lastimeras prácticas de hacer política dentro del marco de  la dominación, más aún en  los estrechos márgenes  que  el  enemigo  con  su  Estado  de  Derecho,  le  concede  a  nuestro  Pueblo>>”.
<<Sobrepasar y desbordar los marcos de la dominación es insubordinarse frente al sistema.  Las definiciones estratégicas, desarrolladas y  llevadas adelante por  la CAM, tienen su expresión más concreta en nuestra postura  frente a  la normatividad de  la política de tierras. Porque más que una demanda de tierras,  la CAM>>
<<<En síntesis, el carácter Anti-sistémico de la CAM no puede ser reducido al marco de un  horizonte  de  izquierda  o  socialista,  ni  tampoco  significa  que  por  estas  definiciones ideológicas  se nos asigne  la búsqueda de un  cambio de estructuras que apunte hacia  la construcción de un Estado Socialista; más bien, el planteamiento de  la CAM debería  ser entendida como un “Anti-capitalismo indianista”, en el cual, el proceso de liberación hace referencia a la reconstrucción-reconstitución del sistema de reproducción social Mapuche, para lo cual es, absolutamente, necesario luchar por el territorio y la autonomía>>.
<<En  definitiva,  con  esta política  la  CAM  plantea  que  no  basta  con  resistir.  Para  una  verdadera  liberación  es fundamental  la  reconstrucción  de  nuestro  pueblo  con  un  carácter  Nacionalitario.  “La reconstrucción  del  Pueblo-Nación  Mapuche”  se  plantea  entonces  con  un  carácter autónomo  política  y  territorialmente,  en  donde  la  rearticulación  de  comunidades permitirá  mayores  grados  de  organización.  “El  mayor  grado  de  conciencia  política  se expresa en el derecho al territorio”>>.
<<Lo  que  existe  es  la  negación  y  la insubordinación frente a las relaciones de opresión y dominación del Estado y del Capital nacional  y  trasnacional.  Es  un  discurso  antagónico  con  las  relaciones  de  Mercado  y estatales  que  nos  oprimen  como  Pueblo-Nación. Nuestra  lucha  es  contra  el  sistema  de dominación imperante, no contra la sociedad chilena en su conjunto. Sin embargo, hemos expresado  que  “Somos  anti-sistémicos  porque  no  aceptamos  la  dominación  occidental como modelo de vida y  lo hacemos principalmente a  través de  la  lucha territorial”. En el fondo  de  nuestra  argumentación  se  deduce  que  la  reconstrucción  nacionalitaria viabilizará el horizonte de la liberación. Y es a través de las recuperaciones de tierras, más bien  del  Control  Territorial,  que  se  hará  posible  todo  nuestro  pensamiento  y  acción política emancipatoria, razón que explica nuestra definición de trabajar en la base y desde las comunidades, ya que es de éstos procesos de lucha territorial y política que depende el conjunto del horizonte de reconstrucción nacional. Así se explica nuestra  intransigencia y radicalidad  en  la  lucha  territorial.  “Es  a  través  del  control  territorial  que  se  generan  las condiciones,  tanto  materiales  como  simbólicas,  que  posibilitan  y  dan  continuidad  a  la reconstrucción  nacional”  ”.  Al  respecto  la  CAM  sostuvo:  “El  territorio  ancestral  es  la plataforma básica, absolutamente esencial para  la reconstrucción de  la Nación Mapuche>>.
<<La  no  existencia  de  un  territorio  propio,  lo  único  que  generaría  sería  el  logro  de autonomías  relativas,  de  tipo  simbólico,  cultural  e  inclusive  folklórico,  que  resultan funcionales  al  sistema  de  dominación,  que  a  la  larga  nos  condenaría  a  la  desaparición física  e  ideológica.  Sin  una  base  territorial  y  sin  los  derechos  políticos  inherentes,  es imposible  la  autonomía  real  y  se  imposibilita  el  desarrollo  de  una  política  de  liberación nacional”>>.
<<La lucha por el territorio expresada por la CAM, efectivamente generó un punto de quiebre al interior del Movimiento Mapuche. Esto se explica porque muchas agrupaciones no dieron y no dan prioridad a la lucha por el control territorial, privilegiando la búsqueda de participación política al  interior de  la  institucionalidad opresora y  la  consolidación de sus  estructuras  políticas,  para  desde  allí  recuperar  el  territorio.  Sin  embargo,  la  CAM siempre  ha  dado  prioridad  a  la  recuperación  y  reconstitución  territorial,  como  base fundamental  para  la  reconstrucción  de  nuestras  propias  estructuras  políticas  y  para  la revitalización, en definitiva, de  todo el  tejido económico,  social  y  cultural mapuche. Por eso es que consideramos que la recuperación de tierras y el control territorial constituyen la plataforma básica de  la reconstrucción de nuestra Nación. Es por  lo anterior, que para comprender  el  pensamiento  y  la  acción  de  la  CAM,  debe  ser  bajo  una  mirada  de territorialidad, en la defensa y la recuperación territorial autonómica>>.
<<Para  lograr  el  control  territorial  efectivo  la  CAM  ha  planteada  la  acción  directa, porque “solo el control territorial posibilitara un mayor poder político, pero este debe estar sostenido  en  el  desarrollo  de  una  cada  vez mayor  base  económica  autónoma.  Ambos, poder  político  y  base  económica,  generarán  las  condiciones  para  sostener  el  Poder Mapuche”.  Ahora  bien,  la  reconstitución  del  territorio  ancestral  (Wallmapuche) representa al mismo tiempo la reconstrucción del Pueblo-Nación Mapuche. Así, Territorio y  Pueblo-Nación  Mapuche  están  entrelazados,  como  también  la  visión  de  un  pasado independiente  con  la  mirada  emancipadora  actual.  Liberarse  es  reconstituirse  y reconstituirse  es  liberarse.  La  liberación  implica  la  posibilidad  de  dotarse  de  muchos elementos  y  así  reconstruir  las  estructuras  propias  para  auto-gobernarse.  La reconstrucción  nacionalitaria  implica  la  recuperación  de  las  estructuras  y  prácticas tradicionales. “El proceso de reconstitución  implica el ejercicio de prácticas comunitarias, ceremoniales  y  organizacionales  como  el mingako,  ngillañmawun,  nguillatún, machitún, palín, trawün, kamarikun, nutram, a la vez ir rescatando y fortaleciendo nuestra estructura organizacional  tradicional  y  los  roles  que  cumplen  determinadas  personas  dentro  del mundo  mapuche  como  los  longko,  werken,  machi,  wewpife,  kona,  weichafe, dugunmachife,  ngenpin,  la  revitalización  de  nuestro  rakiduam,  kimun,  espiritualidad, mapudungun”.  Además  de  la  protección  y  recuperación  de  los  espacios  vitales,  como ngillatuwe,  paliwe,  tren-tren, winkul,  trayeko, menoko, mawida,  eltun  entre  otros.  Esto nos  sitúa  en  una  política  de  reconstitución  de  los  Lof,  Rewe  y  los  Aillarewe, recomponiendo  territorial  y  políticamente  espacios  cada  vez  más  amplios  (Poder Mapuche)  como  base  para  la  reconstrucción  de  la  Nación  Mapuche.  La  acción  de reconstituir  los  Lof  no  puede  ser  definida  como  Autárquica-Comunitarista,  ya  que  es  el primer  paso  es  el  restablecimiento  de  un  proyecto  político  de  rearticulación  de comunidades cuyo objetivo es un proceso de reconstrucción étnica de mayor alcance. Es bajo esta comprensión general que deben entenderse acciones como  las  recuperaciones productivas,  las  acciones  de  autodefensa  y  particularmente  los  procesos  de  control territorial,  los  que  en  definitiva  deberán  ser  asumidos  por  las  comunidades  bajo estructuras políticas autónomas y en perspectiva para la liberación>>.
<<Así también, es en este marco de análisis que deben comprenderse y situarse  las acciones  de  resistencia.  Deben  entenderse  como  parte  de  un  conjunto  de  quehacer político  y  movilización  social  que  se  orienta  al  logro  de  “zonas  de  control  Mapuche autónomo”,  dando  viabilidad  a  la  dimensión  de  la  Autonomía,  en  tanto  autonomía material, económica, cultural y organizativa real y efectiva. Todo esto, como antesala para la reconstitución nacionalitaria. Es así como las posiciones antisistema y anticapitalistas de la  CAM  están  articuladas  hacia  el  logro  de  una  autonomía  real,  lo  que  significa resquebrajar y destruir  las relaciones de dominación que nos oprimen como pueblo. Hay por tanto en la propuesta de la CAM, un tipo de liberación que abarca las distintas formas de  opresión,  tanto  en  su  dimensión  física-geográfica,  económica,  ideológica,  cultural  y política. Para la CAM la forma de asumir y construir autonomía es por la vía de los hechos, una autonomía de facto, en donde la recuperación de los derechos territoriales y políticos es la base de la propuesta>>.
<<…para mayor  comprensión, debemos dejar  claro  también, que la CAM no es separatista, no hemos planteado la creación de un Estado separado del chileno, por tanto la demanda separatista no aparece en nuestro pensamiento y discurso>>.
<<Lo que si se expresa es la demanda territorial para desarrollar un proceso de autonomía y liberación  nacional.  Podría  parecer  claro  que  la  demanda  de  recuperación  total  del territorio  ancestral  abre  la  posibilidad  de  una  posición  separatista,  pero  al  respecto  no tenemos  una  posición  definida.  Lo  que  sí  está  claro,  es  que  en  los  objetivos  de nuestra lucha  no  nos  planteamos  la  posibilidad  alternativa  de  incluirnos  dentro  del  Estado  de Chile, mientras  la  esencia misma  de  la  estructura  de  dominación  que  posee  el  Estado-Nación chileno, sostiene un modelo neoliberal capitalista pro-imperialista. Por tanto existe una radical negación de todas las formas de opresión y dominación sistémica y de Estado-Nación, en tanto éste sirve a los intereses del Capital transnacional>>.
<<Si bien en nuestras definiciones no está la idea separatista, siempre hemos dejado un margen para un  replanteamiento de nuestra postura de acuerdo a  las exigencias del proceso.  Esta  es  una  de  las  razones  por  la  cual  no  hemos  planteado  cabalmente  una propuesta  de  autonomía  a  futuro  (al  menos  como  documento),  ya  que  ésta  debe  ser elaborada  más  adelante,  cuando  constituyamos  las  condiciones  para  su  viabilidad definitiva. El sustento de nuestro proyecto autonómico está en la base comunal y esto es sumamente claro. Se apoya en un quehacer coherentemente anticapitalista y en base al control territorial, en donde, como se ha señalado, se revitalizan las prácticas culturales y las  estructuras  socio-políticas  tradicionales.  Estas  definiciones  son  puestas  en  práctica través de un proyecto de rearticulación de comunidades, creando mayor poder Mapuche y autonomía,  instancias que  tendrán que resolver un  tipo de  funcionamiento mayor que puede generar condiciones o no hacia  la independencia total. Por ahora nuestro norte es la  liberación  nacional,  lo  que  no  quita  la  necesidad  de  seguir  deliberando  al  interior  de nuestra organización, en particular y con el movimiento mapuche autónomo en general,   a  pesar  de  las  dificultades  producidas  por  la  represión,  la  dispersión  y  las  diferencias-desprendimientos  sufridas.  Aún  en  las  actuales  condiciones,  y  de  acuerdo  a  nuestras definiciones  político-ideológicas,  no  es  pretensión  nuestra  construir  propuestas  de características  demasiado  abstractas.  Estamos  por  acumular  fuerzas  en  el  movimiento mapuche  real, desde  las  comunidades  y  desde  abajo,  sin  elitizarnos  y  separarnos de  las comunidades.  Por  eso  nuestros  esfuerzos  actualmente  están  dirigidos  hacia  un  mayor debate  y hacia una mayor  formación en  la base, con el objetivo de  contribuir hacia una mayor politización e ideologización en todos los niveles, sobre todo en aquellas instancias que  sostienen  el  proceso:  las  comunidades  en  resistencia,  sus  estructuras  político tradicionales, sus pu weichafe y militantes>>.
<<Nuestro  proyecto  político-estratégico  está  inconcluso.  Podríamos  señalar  que  ha sido  bloqueado  en  cierta  forma  por  la  acción  del  Estado  y  otras  fuerzas winka  que  nos confrontan. Sin embargo nuestro pensamiento emancipatorio se encuentra enmarcado en un  proceso  de  largo  aliento,  que  implica  la  reconstitución  y  la  re-emergencia  de  la identidad, como una forma de defensa y preservación ante los procesos desestructurantes provocados por la transnacionalización económica capitalista y las relaciones opresivas de parte  del  Estado  de  Chile.  Apostamos  por  un  gran  proceso  de  autoafirmación  étnico-nacional  que  de  calidad  y  capacidad  a  nuestro  proyecto  de  Liberación Nacional,  el  cual seguirá  sustentado  en  un  proyecto  de  reconstrucción  de  nuestro  Pueblo-Nación,  hoy anclado  en  las  experiencias  de  control  territorial  y  en  la  revitalización  de  nuestras expresiones  culturales  y  valóricas,  propias  del  ideario  Mapuche.  La  Reconstrucción  de nuestro Pueblo-Nación es para mayor  comprensión, debemos dejar  claro  también, que la CAM no es separatista, no hemos planteado la creación de un Estado separado del chileno, por tanto la demanda separatista no aparece en nuestro pensamiento y discurso>>.
<<Lo que si se expresa es la demanda territorial para desarrollar un proceso de autonomía y liberación  nacional.  Podría  parecer  claro  que  la  demanda  de  recuperación  total  del territorio  ancestral  abre  la  posibilidad  de  una  posición  separatista,  pero  al  respecto  no tenemos  una  posición  definida.  Lo  que  sí  está  claro,  es  que  en  los  objetivos  de nuestra lucha  no  nos  planteamos  la  posibilidad  alternativa  de  incluirnos  dentro  del  Estado  de Chile, mientras  la  esencia misma  de  la  estructura  de  dominación  que  posee  el  Estado-Nación chileno, sostiene un modelo neoliberal capitalista pro-imperialista. Por tanto existe una radical negación de todas las formas de opresión y dominación sistémica y de Estado-Nación, en tanto éste sirve a los intereses del Capital transnacional>>.
<<Si bien en nuestras definiciones no está la idea separatista, siempre hemos dejado un margen para un  replanteamiento de nuestra postura de acuerdo a  las exigencias del proceso.  Esta  es  una  de  las  razones  por  la  cual  no  hemos  planteado  cabalmente  una propuesta  de  autonomía  a  futuro  (al  menos  como  documento),  ya  que  ésta  debe  ser elaborada  más  adelante,  cuando  constituyamos  las  condiciones  para  su  viabilidad definitiva. El sustento de nuestro proyecto autonómico está en la base comunal y esto es sumamente claro. Se apoya en un quehacer coherentemente anticapitalista y en base al control territorial, en donde, como se ha señalado, se revitalizan las prácticas culturales y las  estructuras  socio-políticas  tradicionales.  Estas  definiciones  son  puestas  en  práctica través de un proyecto de rearticulación de comunidades, creando mayor poder Mapuche y autonomía,  instancias que  tendrán que resolver un  tipo de  funcionamiento mayor que puede generar condiciones o no hacia  la independencia total. Por ahora nuestro norte es la  liberación  nacional,  lo  que  no  quita  la  necesidad  de  seguir  deliberando  al  interior  de nuestra organización, en particular y con el movimiento mapuche autónomo en general,   a  pesar  de  las  dificultades  producidas  por  la  represión,  la  dispersión  y  las  diferencias-desprendimientos  sufridas.  Aún  en  las  actuales  condiciones,  y  de  acuerdo  a  nuestras definiciones  político-ideológicas,  no  es  pretensión  nuestra  construir  propuestas  de características  demasiado  abstractas.  Estamos  por  acumular  fuerzas  en  el  movimiento mapuche  real, desde  las  comunidades  y  desde  abajo,  sin  elitizarnos  y  separarnos de  las comunidades.  Por  eso  nuestros  esfuerzos  actualmente  están  dirigidos  hacia  un  mayor debate  y hacia una mayor  formación en  la base, con el objetivo de  contribuir hacia una mayor politización e ideologización en todos los niveles, sobre todo en aquellas instancias que  sostienen  el  proceso:  las  comunidades  en  resistencia,  sus  estructuras  político tradicionales, sus pu weichafe y militantes>>.
<<Nuestro  proyecto  político-estratégico  está  inconcluso.  Podríamos  señalar  que  ha sido  bloqueado  en  cierta  forma  por  la  acción  del  Estado  y  otras  fuerzas winka  que  nos confrontan. Sin embargo nuestro pensamiento emancipatorio se encuentra enmarcado en un  proceso  de  largo  aliento,  que  implica  la  reconstitución  y  la  re-emergencia  de  la identidad, como una forma de defensa y preservación ante los procesos desestructurantes provocados por la transnacionalización económica capitalista y las relaciones opresivas de parte  del  Estado  de  Chile.  Apostamos  por  un  gran  proceso  de  autoafirmación  étnico-nacional  que  de  calidad  y  capacidad  a  nuestro  proyecto  de  Liberación Nacional,  el  cual seguirá  sustentado  en  un  proyecto  de  reconstrucción  de  nuestro  Pueblo-Nación,  hoy anclado  en  las  experiencias  de  control  territorial  y  en  la  revitalización  de  nuestras expresiones  culturales  y  valóricas,  propias  del  ideario  Mapuche.  La  Reconstrucción  de nuestro Pueblo-Nación es la base ineludible para la Liberación Nacional>>.
Concepción, 17 de junio de 2013 
Héctor Llaitul Carrillanca   
Preso Político Mapuche CAM



1 comentario:

  1. Buena reflexión- Como es tanto texto sugiero por con letras oblicuas y entre cremillas lo que se indica en el reportaje. y con letra normal sus observaciones al respecto. Me costó leerlo. Saludos.

    ResponderEliminar